Rotterdam (a una hora en tren de NS y con el servicio Fyra a 41 minutos desde Ámsterdam) es la ciudad natal del Holandés Errante. Cuando yo vivía en Holanda era la época del chiste ‘en Rotterdam venden las camisas con las mangas ya remangadas’, caracterizando así a los rotterdameses como trabajadores natos. Otro chiste decía ‘en Rotterdam se gana el dinero, en La Haya se decide cómo gastarlo y, finalmente, se gasta en Ámsterdam’.
Sea como fuera, es cierto que hasta hace unos años Rotterdam era una ciudad industrial, tenía el puerto más grande del mundo (actualmente es el segundo mayor) y la poca diversión se limitaba a salir los fines de semana. Esto ha cambiado mucho, aunque ‘el’ rotterdamés sigue siendo una persona directa, serena, casi áspera que pregona el lema niet lullen maar poetsen (una forma de decir: no hables tanto, a trabajar o realizarlo).
Supongo lo que haya influido mucho en todo esto, es el hecho que Rotterdam fue bombardeado en la Segunda Guerra Mundial y se destrozó prácticamente por completo. La reconstrucción de la ciudad no solo ha costado mucho tiempo y esfuerzo, sino también borró de un plomazo el centro histórico de la ciudad y con ello el corazón y la identidad. El resultado hoy en día tal vez sea lo atractivo de Rotterdam: una arquitectura nueva combinada con pocos sitios históricas y unas raíces industriales.

Skyline de Rotterdam
Referente a la arquitectura: la nueva línea al lado del río Maas es llamado por los rotterdameses el Manhattan aan de Maas, comparándose con la imagen de esa ciudad estadounidense. Es verdad que han hecho mucho en los últimos años para intentar mejorar (la imagen de) Rotterdam. No sólo arquitectónicamente, sino también en lo cultural. Organizan muchos eventos de todo tipo durante el año para un público muy variado. Pero vayamos por partes.
Galería comercial Lijnbaan
El centro de la ciudad se encuentra enfrente de la estación central y se puede visitar andando o utilizando el denso red de tranvías. A unos diez minutos andando está la calle Lijnbaan, inaugurada en 1953 como primera calle peatonal en Europa destinada a una galería comercial. Al principio de la calle, a mano izquierda, está la plaza Stadhuisplein, Plaza del Ayuntamiento, una de las zonas con bares, restaurantes y terrazas. Al lado se halla el Ayuntamiento, del año 1920, uno de los pocos edificios que

Zona comercial cerca de Lijnbaan
ha sobrevivido los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial. Está construído en un estilo Beaux-Arts, con influencias Bizantinos, romanos y de Art Deco. Desde enero de 2009, Ahmed Aboutaleb es el primer alcalde de origen marroquí en Holanda, regentando Rotterdam. Al final de Lijnbaan, a mano izquierda, hay otra calle comercial, semi enterrada, oficialmente Beurstraverse, que llaman los rotterdameses Koopgoot, canalón comercial, que pasa por debajo de la calle Coolsingel. Aquí es donde se concentran los comercios famosos como De Bijenkorf y HEMA y las marcas y tiendas internacionales. Saliendo del Beurstraverse hay una calle paralela, la Meent, antes deteriorada y llena de tiendas baratas, de compañías telefónicas y agencias de trabajo temporal. Después de una transformación, ahora es la calle de moda con una oferta variada de restaurantes, algunos con estrella Michelin, como Restaurant Fred, lounge bars, discotecas y terrazas. También hay boutiques y tiendas de marcas de lujo. Al final de calle, en la perpendicular Binnenrotte se celebra los martes y sábados el mercadillo más largo de Europa. Más de 470 puestos de flores y plantas, alimentación, ropa, comida, antigüedades, herramienta y mucho más.
Oude Haven

Oude Haven
Al final de la calle Binnenrotte se halla la zona de Oude Haven, otro barrio con muchas terrazas y restaurantes, al lado de un pequeño puerto, muy animado en verano. Con 44 metros de altura (!) het Witte Huis, la Casa Blanca, otro edificio que sobrevivió el bombardeo de la guerra, fue durante mucho tiempo el primer y más alto rascacielos de Europa. Está flanqueado por la Biblioteca Municipal, ubicada en un edificio construído en forma de un lápiz. Enfrente construyeron las famosas Kubuswoningen, casas cúbicas, una obra del arquitecto Piet Blom. Una de ellas está abierta al pública y se puede visitar. Hacía el suroeste se encuentra la nueva Skyline, compuesta por edificios con oficinas, viviendas y algunos hoteles. Hay unas vistas magníficas sobre el río Maas y la zona nueva, de Kop van Zuid, al otro lado del río.
De Kop van Zuid y Scheepvaartkwartier
De Kop van Zuid es un barrio nuevo en las orillas del río Nieuwe Maas, enfrente del centro de la ciudad. Se está construyendo el barrio sobre los terrenos portuarios en desuso de Binnenhaven, puerto interior, Entrepothaven, puerto de depósito aduanero y Spoorweghaven, puerto de ferrocarril. Un buen ejemplo como Rotterdam ha sabido dar un uso nuevo y útil de una industria en desuso. Aparte de viviendas (de lujo) hay teatros, restaurantes de todo tipo, el Nederlands Fotomuseum, museo Nacional de Fotografía y el

De Kop van Zuid
famoso hotel New York. Este hotel está ubicado en lo que hasta 1977 fue la oficina de la Holland America Lijn, la línea regular de buques entre Holanda y Estados Unidos. De aquí partieron miles de emigrantes que zarparon rumbo a America en búsqueda de una vida mejor. Toda la zona portuaria se puede visitar en barco de la compañía Spido, que realiza varias rutas de distinta duración. Al otro lado del río se ve el Euromast, una torre multifuncional de 185 metros de altura para turistas, famosa por sus vistas panorámicas sobre toda la ciudad. Hay restaurantes y hasta un hotel a los 112 metros.
Al lado de la torre está el parque Het Park, El Parque, a secos, que conoce cada rotterdamés con ese nombre. Fue el primer parque público de Rotterdam, que abrió en 1863. Sobre todo en verano el parque está muy animado. Se organizan muchas actividades, festivales y eventos, hay gente haciendo picknick y barbacoa en la zona habilitada para ello. Hay un bar restaurante, Parkzicht y, justo fuera del parque, al lado del muelle, está el restaurante Parkheuvel, de dos estrellas Michelin, todo un ícono de la ciudad. Este barrio se llama el Scheepvaartkwartier y es uno de las 20 barrios más ricos de Holanda. En los últimos años se ha creado una oferta amplia de todo tipo de bares, restaurantes y terrazas. Es otro barrio de moda que se ha adaptado a los nuevos tiempos, sin perder su sabor y origen, en este caso portuario.
Nieuwe Binnenweg

De Kunsthal
Yendo desde aquí hacía el centro de la ciudad pasaremos por dos museos interesantes: Kunsthal Rotterdam, que no cuenta con una colección permanente, sino organiza varias exposiciones temporales al año, a la vez, de distinto tipos de arte. El museo está ubicado en un edificio moderno, diseñado por el arquitecto renombrado holandés Remco Koolhaas. El otro museo es el Boijmans van Beuningen, nombrado a su fundador y que posea 140.000 objetos. La colección semi fija va cambiando cada tres años y es un viaje por el tiempo, desde la Edad Media hasta el siglo XX. Entre otras cuenta con obras de Rembrandt, Breughel, Jeroen Bosch, Titiaan y Rubens, pero también de Kadinsky y Magritte.
Cerca del museo Boijmmans van Beuningen hay tres calles emblemáticas: la Oude Binnenweg, Nieuwe Binnenweg y Witte de Withstraat. La última fue antaño una calle llena de clubes alternes y barres de mala muerte, bastante decaída en los últimos años. (Parece mentira que lo repita otra vez, pero) es una zona más que se ha renovado y está ahora llena de tiendas, bares y restaurantes multi culturales.

Oude Binnenweg
El hotel y Restaurante Bazar sirve platos con influencias nortafricanos y del Medio Oriente. La Oude y Nieuwe Binnenweg son dos calles que han sobrevivido los bombardeos de la guerra y representan el viejo Rotterdam. No hay que esperar gran cosa, son calles con muchas influencias extranjeras de los immigrantes que viven ahí. Hay algún bar típico y en la calle Gaffelstraat, una bocacalle de la Nieuwe Binnenweg, está Bierhandel de Pijp, lo que fue una cervecería a por mayor y lleva ya 116 años como restaurante.
Todo un clásico y un instituto en Rotterdam, donde la carta está escrita en la pizarra y te sientas en una de las largas mesas, codo a codo con otros clientes (famosos) enfrente de la cocina abierta. La carta es sencilla, con influencias francesas y siempre se ha comido bien. Últimamente ha habido opiniones de que la comida ya no es como era, tal vez por una clientela nueva que esperaba más ante tanta fama y espectativas. Fuere como sea, si estás en Rotterdam y tienes la oportunidad, no dejes de visitarlo.

Mauritsweg
La Oude Binnenweg termina al final de la calle Lijnbaan, donde iniciamos nuestra ruta. Donde empieza la Nieuwe Binnenweg podemos coger la calle Mauritsweg hacía la Estación Central. En el camino pasamos por unos buenos restaurantes chinos, el mejor – especializado en Dim Sum – con muchos clientes chinos, es el Grand Palace, en el edificio de la sala de conciertos de Doelen. Antes de llegar a la estación está la calle Kruiskade a mano derecha, con algunas tiendas de lujo, sobre todo de ropa, y cines (que en Holanda siempre son de versión original). Si hubiéramos ido a la izquierda, en vez a la derecha, entraríamos en la West-Kruiskade, una calle deteriorada por problemas de immigración y droga. Actualmente se está renovando y quieren convertir esta calle con 100 tiendas en algo mejor de lo que es ahora.
Con esta ruta hemos visto lo más interesante del centro de la ciudad. Faltaría mencionar Diergaarde Blijdorp, el zoo, que con un millón y medio de visitantes es una de las atracciones más visitadas de Holanda. Se encuentra en el barrio Blijdorp, a las afueras del centro, cerca del camping Stadscamping Rotterdam fácilmente accesible en tranvía.

Delfshaven
Y, por último, el barrio Delfshaven, también a las afueras de Rotterdam, en el oeste, accesible con el metro y tranvía, líneas 4 y 8 que salen de la Estación Central. Hasta su independencia en 1795 dependía de Delft y en 1886 fue anexado por los rotterdameses. Hoy en día es un municipio de Rotterdam, con unos 70.000 habitantes en una superficie de 5,8 kilómetro cuadrado. Tiene un puerto en un ambiente histórico, un museo y varios restaurantes. En verano hay numerosas terrazas.

Skyline Rotterdam